top of page

186°

feb5

Orión

Sacro

☯️

🧠

🏺

Mental

Yo Sé

Ly: Yo Soy Palabra de Creación

BLOG

octahedron crystal sogutwiefertig_edited.png

YO: Todo lo que sucedió estos días me ha hecho sentir muy depresivo, no logro remontar mi energía, estoy muy bajo… Agotado, siento como si la energía que estaba sosteniendo se hubiera desplomado por los suelos y lo único que puede hacer es recostarme en la cama… Mirar el techo. Y en lugar de que los temas se vuelvan más ligeros, acuarianos, da la sensación de que cada vez es más pesado. Tenía la expectativa de que hablar de Orión sería de lo más emocionante, ya que me encuentro justamente en las pirámides que reflejan esta constelación, y hay tanto por decir… Pero hace dos horas que miro la pantalla, fijamente, y sólo siento vacío…


SOY: Tal vez ese sea tu problema… La expectativa. Crees que por llevar un patrón (semana mental, semana emocional, semana física, cada una con su chakra), deberías vivir tu vida mental, emocional y física acorde a dicho patrón establecido. Y no es así. Es como pensar que en los 3 meses de primavera tienes prohibido sentirte depresivo porque eso es algo más de otoño.


YO: Sí, comprendo, el calendario es un patrón constante pero cada individuo le vive de una forma específica. Pero bueno, me siento como con la responsabilidad de informar y mantener una línea. O sea, siempre he oído que hay que ser ejemplo, y ¿qué ejemplo soy siendo un guía que cada tantas semanas se deprime? ¿No soy incoherente? ¿No es acaso mi incoherencia negativa para el proceso de los demás?


SOY: Lo es si los demás proyectan sus vidas en la tuya como si fuese la propia. Si en lugar de autorreferenciarse, dependen de tu energía. Pero la verdad es que este es el camino del YO SOY no del Matías.


YO: Aunque… Muchas veces parece más el camino de mi personalidad…


SOY: ¿Cómo mostrarías lo que es el SOY sin el YO?


YO: No sé… Sin emociones…


SOY: Sería como un cura cristiano dando consejos de matrimonio y convivencia de pareja…


YO: Vaya analogía… Pero lo entiendo… ¿Qué consejo puede darse si no se experimenta…? Lo que vive mi personalidad emotiva es una herramienta de aprendizaje para el Ser.


SOY: Así que úsalo. No esperes sentarte a escribir una gran historia, eso está en mis manos, en las tuyas está sentir esa historia.


YO: Tal vez al mirar Orión vuelve a mí toda la culpa, todo el peso, y la responsabilidad… No importa dónde estés en el mundo, siempre verás la constelación de Orión, aunque a veces desaparezca de un hemisferio para mostrarse en el otro, y eso tal vez es como la clave de lo que me pesa: no podemos escapar de ver la razón por la cual estamos en la Tierra.


SOY: Orión tiene un secreto, y el mismo sólo puede verse desde este sistema solar…


YO: ¿Cuál?


SOY: El Portal de Orión. La constelación es claramente identificable en el cielo por su perfecta alineación estelar semejante a un moño o pajarita, con su nudo en las tres estrellas centrales, conocidas a veces como las Tres Marías, o los Tres Reyes, llamadas por los árabes como Alnilam, Alnitak y Mintaka (el Cinturón de Orión). A sus extremos se encuentran las famosas estrellas de Rigel (la pierna) y Betelgeuse (la cabeza), y en su cintura prende la Nebulosa de Orión (Espada). Orión es el nombre de un gigante mitológico, un guerrero que perseguía a las Pléyades, 7 Bellas Hermanas. El mismo era un cazador, acompañado de su Perro (Canis Maior). Este cazador mataba todo lo que encontraba  a su paso, y tal vez por esta historia muchos han considerado a la constelación como conflictiva, atribuyéndole la Guerra más importante de la Galaxia. Y sin embargo, nunca hubo una guerra allí.


YO: ¿Cómo? ¿No, Nunca?


SOY: Al menos no la que muchos esperan que haya sucedido, al estilo de George Lucas y su saga de Star Wars. Orión es un Portal, pues su nebulosa es una fuente importante de energía. Sin embargo, desde cerca de la misma, las estrellas no conforman ningún gigante, pues poseen distancias diferentes a las que percibimos desde la Tierra, entre 250 a 1400 años luz. Desde nuestra perspectiva, estas estrellas componen la constelación más importante y perfecta del cielo y sus tres estrellas se ubican de una manera perfecta indicando un camino hacia el centro del Portal: una espiral áurea.


YO: 1,1,2,3,5,8,13,21,34,55,89,144… La secuencia infinita de números cuya suma del primero con el segundo da el resultado de un tercer número, que se multiplica exponencialmente, y que en forma de geometría crea un fractal cada vez más grande y expansivo.


SOY: Con la forma del brazo de una galaxia, del giro de un huracán, de la disposición de los pétalos de una flor. La posición de las tres estrellas del Cinturón indican la curvatura de una de estas espirales, indicando el camino a la Puerta de esta Realidad. Para los antiguos, esto indicaba que la constelación era la puerta entre los tiempos y los espacios, y por ello, comprendieron que la gran estrella Mintaka, era una suerte de picaporte, que al girar en el cielo, nos hacía pasar de un lado al otro de la realidad. Por ello, Mintaka se volvió el Eje del Cielo, siendo la primera estrella en salir por el Este y la primera en ponerse en el Oeste, y debido a ser la constelación Tropical por excelencia, la misma también marcaba el horizonte del Hemisferio Norte y Sur de la Bóveda Celeste. Para los Atlantes esta estrella marcaba el inicio y fin de todas las cosas, y las historias decían que la creación misma había surgido de esta estrella, y que un día todo volvería a ella. Pero sólo volvería para ser reinventado. Con las explicaciones de los Sirianos en la Tierra, los humanos comprendieron que el universo no tiene principio ni fin, y que cuando se toma consciencia de la capacidad de manifestar, uno mismo puede ser el que abra la puerta de Mintaka hacia otra realidad, hacia un nuevo Universo donde uno mismo es Dios. Esta es la base de la proyección humana sobre esta constelación, y fue así que se comprendió que para poder ser Dios era necesario atravesar Mintaka. Pero primero, debían recorrer toda la Vía Láctea.


YO: El Camino Iniciático Celestial.


SOY: Pasando por cada constelación, viviendo los aspectos de cada estrella, integrándolos en todos los planos: físico, mental, emocional, y en la trinidad de la Mente. Bajo la dirección de los arquitectos estelares, los humanos comenzaron a trazar desde Orión el plan que recuerdas…


YO: Ater Tumti, traer el Cielo a la Tierra… Por eso trajeron Orión…


SOY: Y construyeron las Pirámides. En todo el Mundo, las pirámides representan las constelaciones, el camino iniciático que culmina en Mintaka, que hoy llamas La Gran Pirámide de Guiza.


YO: La constelación fue graficada en muchas partes de la Tierra, muchas pirámides, círculos, templos, todos basados en ella…


SOY: Pues todos querían abrir las puertas de esta constelación en la Tierra; pues al girar Mintaka, atravesarían todas las Dimensiones. Recuerda que las Pirámides son esqueletos de Esferas multidimensionales. Son Octaedros, Semillas de la Geometría que contiene a todo el Ser, como la Tierra. Sembrando pirámides en el mundo, lograban sembrar la humanidad divina. Así podían abrir el Portal del Cielo en la Tierra.


YO: Una gran maquinaria… Donde las Pirámides son las llaves de activación…


SOY: Y el humano debía recorrer los caminos para prepararse para esta activación. Ahora bien, recuerda, pasar de una dimensión a la otra es como una célula que pasa de un órgano a otro: todo será diferente, hay que adaptarse, activar el potencial para lograrlo, pero además, muchos virus pueden pasar también, y Orión fue uno de los centros dominados por esos virus interdimensionales. Desde la Sexta Dimensión, algunos de los programas distorsionados se proyectaron hacia nuestras realidades, y hubo dos bandos: aquellos que consideraban que dejarle pasar sería positivo, y los que consideraban que era negativo.


YO: Comparado a lo que nos pasa hoy, podríamos decir que si Orión es un Ministerio de Salud en tiempos de esta pandemia de Covid, allí nos encontraremos con personas que dirán: es fundamental usar mascarilla, prevenir el virus, hacer cuarentena, esperar a que llegue la vacuna y dejar que pase. Mientras que habrá otros diciendo: lo mejor es que pasemos el virus, que nuestro sistema inmune lo reconozca, que nos hagamos fuertes por la inmunidad de grupo, ya que la vacuna será buena para los que están en riesgo y las mascarillas son preventivas pero malas para la propia salud. Las dos visiones tienen cierta razón, son puntos de vistas diferentes ante cómo enfrentar un virus. 


SOY: Y los hay quienes consideran que los virus son la clave de la evolución. Un humano evolucionó por atravesar virus, no por alejarse de ellos. Y sí, muchos mueren en el proceso, sin embargo, el sistema inmune se fortalece y nos hace seguir adelante. Cuando hay un mal externo y esperamos que sea algo externo lo que lo cure, siempre estaremos pendientes de la salvación en el exterior, dependientes del poder externo sobre nosotros. Podríamos decir que el mayor problema no es enfrentar el virus, es tal vez la incapacidad de gestionar la salud. El virus de la Galaxia, para algunos era la clave de la evolución en la Tercera Dimensión, algo que aceleraría los procesos. Y por ello incentivaron a que el mismo se disperse desde el Portal de Orión, mientras sus habitantes no hicieron más que entrar en conflicto, pensando que la mejor forma de trascender el virus era protegiendo a las células del cuerpo, y los otros considerando que la mejor manera era exponiéndolas al virus…


YO: Creo que yo estaba en ese bando… Pues por ello fui uno de los tantos que decidió nacer a vivir el virus… Igual que cada día en nuestro cuerpo nacen y mueren millones de células tratando de adaptarse al virus para sobrevivir, los seres vivos hacemos lo mismo a otra escala, con millones de seres naciendo y muriendo mejorando en cada ciclo.


SOY: Esa es la Guerra de Orión… Una guerra sin armas láser, sin tanques, ni militares… Es una guerra de Guerreros de la Luz, es decir, Glóbulos Blancos. Es el sistema inmunológico del cuerpo Galáctico. La batalla es lograr asimilar el ADN del virus de la inconsciencia destructiva, de “Maia”, el sueño ilusorio de distorsión, y desde allí, reconociendo el sueño dentro, reconocerse soñador, alquimista de la realidad, capaz de reconstruir el sueño, de empoderarse de la transformación del propio ser, del mundo, de la existencia.


YO: Es una guerra interior.


SOY: Orión representa la Creación del sentido por el cual existimos, por el cual nos hemos diseñado desde la distorsión, para reconocer, trascender, crear, vivir nuestras propias distorsiones para hacer de las mismas arte, manifestación, poder interior, volvernos creadores.


YO: Y la materia prima de la creación es la energía y la polaridad… Que se manifiesta en forma de Emoción…


SOY: Por ello esta guerra te mueve tanto. Has estado milenios, si no más, tratando de comprender esta batalla en la que te has visto sumergido y a la cual consideras que has sumergido a los demás. A veces arrastramos a otros a un campo de batalla en el que no deseamos combatir por nosotros mismos. Y quien se deja arrastrar lo hace simplemente porque está dispuesto a ser arrastrado. Eso os hace Guerreros de la Luz, y sufriendo en la batalla os habéis convertido en Trabajadores de la Luz. Sin embargo, sólo debéis recordar algo sencillo: Sois la Luz. La Luz no esta fuera, sois vosotros mismos. No defendéis nada más que vuestro propio brillo, y por lo tanto, luchando contra la sombra, no hacéis más que enfrentaros a vuestras propias proyecciones. Por ello la batalla comienza a ganarse cuando tomas tu propia espada y reconoces que en ella no hay un arma de lucha, sino una herramienta de honor. La hoja de la espada de Orión es un espejo, y cuando blandes a los vientos su filo abatiendo a tus enemigos, el reflejo en su hoja es tu rostro. No hay batalla afuera más que aquella que yo decido luchar para mí mismo.


YO: ¿Y cuántas veces habremos de luchar? ¿No es un fracaso tener que repetir la misma batalla tantas veces?


SOY: «En este camino, el esfuerzo nunca se desperdicia, y no hay fracaso. Incluso un pequeño esfuerzo hacia la consciencia espiritual te protegerá del mayor temor».


YO: Es que, a veces siento que cada día pierdo esta batalla, siento que no es suficiente…


SOY: «Es mejor cumplir con su propio deber, aunque carezca de mérito, que hacer el de otro, aunque sea eficientemente. Es mejor morir cumpliendo con su propio deber, porque cumplir con el deber de otro está plagado de peligros».


YO: Sí, debo concentrarme en mi propia tarea, en mi propia misión. Es que a veces todo me parece que me queda muy grande, es demasiado tiempo, demasiadas cosas…


SOY: «Realiza la tarea que tienes delante. Cuando estés preparado para realizar otra de mayor empeño, ya se te ofrecerá igual oportunidad» … «Debes ocuparte solamente de la acción, nunca de sus frutos. No dejes que el fruto de cualquier acción sea tu motivo, ni te apegues tampoco a la inacción».


YO: El peso que siento de mi batalla es por mi vocación a querer ayudar a todos, a enmendar esa culpa, que por más que sea egoísta, me hace mirar a los demás con ojos de madre o padre, como niños a quien debo guiar…


SOY: «Te afliges por quienes no lo merecen, y tus palabras no son palabras de sabiduría. Un sabio no siente lástima por los que viven, ni tampoco por los que mueren. La vida y la muerte no son diferentes».


YO: Pues todos siempre fuimos uno… Y lo que hago por mí lo hago por todos…


SOY: «Lo sé, oh Matías, los seres del pasado, del presente y los del futuro, pero nadie realmente me conoce».


YO: Te hemos olvidado, pues yo mismo me he olvidado… Siento que pierdo la batalla una y otra vez…


SOY: «Corta la duda ignorante en tu corazón con la espada del autoconocimiento. Observa tu disciplina. Levántate».


YO: ¿Dónde he escuchado yo todas estas palabras?


SOY: Son palabras de Krishna a Aryuna, en la batalla de Kurukshetra, donde el príncipe duda sobre la necesidad real de vivir esta batalla, y Krishna le explica el deber de un guerrero en una profunda conversación que da origen al Bhagavad-Guita (del sánscrito “El Canto de Dios”), una de las bases filosóficas más antiguas del mundo que forman parte de los textos del Mahabharata (La Gran Guerra de la Tribu Bharata, fundador de la India).


YO: Siempre me llamó la atención que un libro tan sagrado se dé en una conversación de guerra, en que el mismo Krishna incita a Aryuna a matar a sus enemigos alegando que en realidad no existen, pues nada realmente existe, y todo es uno.


SOY: La lectura del mensaje es realizado en un contexto de guerras, pero su contenido describe la verdadera batalla de todo ser. La Guerra de Orión vive en ti, es tu lucha por volverte consciente en cada ciclo, recordando que el único camino posible a la sanación es la disciplina del espíritu, no la victoria sobre los enemigos. No hay ganadores en una guerra en la que ambos bandos son uno mismo.


YO: Entiendo… A veces es difícil aceptar esto cuando uno ve que repetimos lo mismo y seguimos generando guerras entre los unos y los otros…


SOY: “El hombre real no nace ni muere. Siempre ha sido y seguirá siendo eternamente. El cuerpo puede morir y ser muerto, mas el espíritu que mora en el cuerpo no puede morir. Así pues, ¿cómo creer que quien sabe que el verdadero hombre es eterno e indestructible, caiga en la ilusión de suponer que pueda matar, matarse o ser muerto? Mas si no creyeras en mis palabras y vivieses en la ilusión de tener por realidades la vida y la muerte, tampoco deberías afligirte. Porque así como los hombres han nacido, deberán morir. ¿Por qué, entonces, lamentar lo inevitable?”.


YO: Miro hacia delante y suspiro, siento que no llegaré a cumplir todo lo que está en mí…


SOY: “Líbrate de la ansiedad por las cosas de este mundo; no te dejes gobernar por las ilusiones de este mundo perecedero. Quien fía su bienestar a los resultados de la acción pierde la dicha y se ve miserable y descontento”.


YO: Y ¿cómo hago?


SOY: “Atiende tan sólo al recto cumplimiento de la acción y no a la recompensa que de ella pudiera derivarse. No te inquiete la esperanza del premio; pero no cedas tampoco a la inacción a que suelen abandonarse quienes han perdido toda esperanza de recibir recompensa por sus acciones”.


YO: La esperanza tambalea cuando veo que tras muchas explicaciones, a veces ni siquiera yo mismo comprendo o practico lo que digo. Siento que debo justificar cada cosa que hago, que pienso o que soy…


SOY: “Cuando trasciendas la ilusión ya no te conturbarán las discusiones teológicas sobre los ritos, las ceremonias y demás ropajes de la enseñanza espiritual. Entonces te librarás del apego a los libros sagrados y a los escritos de los teólogos y quienes ambicionan interpretar lo que no entienden”.


YO: Pareciera en tal caso que en esta batalla hay que hacerlo todo y sin embargo, no hacer nada…

“El alma de quien ha percibido en su interior el verdadero ser se mantiene imperturbable en todas las situaciones”.



SOY: “Quien vea la acción en la inacción y la inacción en la acción es sabio entre los hombres”.


YO: O sea que hay que saber cuándo es justo actuar desde no hacer nada ni involucrarse, ya que a veces el silencio y el no hacer nada moviliza muchas más cosas, y reconocer que en muchos casos hacemos cosas que no poseen ningún efecto en la realidad, sólo por hacerlas y rellenar espacios.


SOY: “Pues el alma de quien ha percibido en su interior el verdadero ser se mantiene imperturbable en todas las situaciones”.


YO: Los voceros de la Confederación dijeron que demoraremos más ciclos en cumplir con nuestro verdadero camino… Y en esas afirmaciones es inevitable ponerse mal, uno siente que llevará mucho lograr encontrar el Yo Soy… ¿Cómo hacer para encontrarte?



SOY: “Los faltos de discernimiento espiritual creen que Yo, el Inmanifestado, me manifiesto visiblemente a sus ojos. Pero has de saber, Matías, que en mi esencia no soy visible a los ojos de los hombres. Tras las formas por mí emanadas, permanezco invisible para el ignorante. No he nacido y no moriré jamás, aunque el obcecado mundo lo ignore, porque toma la sombra por la substancia”.


YO: Siempre estás ahí, pero perdemos tiempo en querer ver, en demostrar… Cuando es tan grande que es indemostrable, inexplicable…


SOY: “Los tengo a todos en mi mente, pero sus mentes no pueden contenerme en esencia. Los hombres están ofuscados por la ilusión de los pares de opuestos, y en vez de la Unidad ven las antitéticas formas de atracción y repulsión. Pero algunos están ya libres de la ilusión de los pares de opuestos y saben que soy Todo en Uno”.


YO: …Y ellos son los que han ganado la Batalla…


SOY: “Escucha ahora, ¡oh príncipe!, cómo quien ha logrado la perfección puede alcanzar la felicidad eterna. Purificado el ánimo, esclarecido el entendimiento, resueltamente subyugada la personalidad, abstraído de los objetos de sensación, trascendidos el gusto y la repugnancia, el placer y el dolor; conscientemente adorador, sobrio, dueño de sus pensamientos, palabras y acciones; disciplinado en la meditación y la concentración; libre de pasión, egoísmo, violencia, arrogancia, concupiscencia, cólera y avaricia; lleno de sosiego y paz entre el bullicioso tráfago del mundo circundante, está dispuesto a identificarse con la conciencia de la Vida universal sin perder la conciencia individual. Sí, ¡oh príncipe! Aunque en tu ilusión y personal engreimiento creas que podrás eludir el combate, no escaparás de los lazos del deber al cual tu karma te ata, pues le has elegido, y harás sin remedio lo que obcecado no quieres hacer. En el corazón de todos los seres mora el YO SOY, cuyo ilusionante poder de diferenciación los mueve a evolucionar en la rueda del Tiempo”.

TAREA

EN BREVE

CÓDIGO

TIERRA: CRISTAL-DIAMANTE= en el tercer aspecto de la trinidad de la tierra están los minerales más puros, de carbono y silicio, que generan la pureza ante la mayor presión de todas. Conectados al aspecto del cuerpo físico, éste es el resultado de la mayor presión del tiempo y el espacio: a mayor gravedad, condensación y presión, más puro y perfecto el resultado final. Los cristales puros y diamantes son así el anclaje más físico de la belleza del espíritu y el alma de la tierra.
ankh ready4.png

(6/12)

bottom of page