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RH-h: Yo Soy Soñador Infinito

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YO: “Es de noche, el sol se ha tapado con sus manos”… No paraba de repetir aquel día antes de desmayarme. Y hoy vuelve a mi mente. Fui a la pirámide, y volví a perder la fuerza, y casi el conocimiento, a punto de desmayarme. Ahora mismo me siento débil, como si fuera a caer en cualquier momento sobre el teclado…


SOY: Necesitas sucumbir al Subconsciente más allá del Inconsciente.


YO: ¿Cómo?


SOY: Perdiéndote en lugar de buscar una lógica.


YO: ¿Qué diferencia hay entre Subconsciente e Inconsciente?


SOY: Según el Psicoanálisis, ninguna.


YO: ¿Entonces?


SOY: Vamos a ello. Existen dos grandes divisiones en la psicología del siglo XIX: el Supraconsciente y el Subconsciente. Es decir, que se dibuja una delgada línea de la consciencia en que se establecen los diferentes estados de la misma estando por debajo (sub) y por encima (supra) de esta línea. La típica imagen para comprender esta idea es la de un iceberg, un enorme trozo de hielo que se ha desprendido de glaciares o capas polares y que vaga solitario por el mar y el océano. De igual manera que cuando pones un cubo de hielo en un vaso, el mismo flota por el aire que contiene en su interior, dejando una pequeña parte por encima de la superficie mientras que la mayor parte, por su peso, se encuentra bajo el agua; un iceberg también deja por encima una pequeña fracción de lo que realmente es, mientras que la gran parte del mismo se esconde debajo.


YO: …Lo que es más peligroso… Es lo que hundió al Titanic.


SOY: Así es, el gran peligro de un iceberg es la parte inferior, que es más de un 80% del tamaño total del trozo de hielo, escondido bajo el límite de la superficie del agua. Esta imagen define a la perfección la idea de lo “supraconsciente” como aquello que podemos ver, tocar, con lo que uno puede relacionarse, mientras que el “subconsciente” es todo aquello que no vemos, que no podemos tocar y de lo que no tenemos idea que existe. Hacia fines del siglo XIX y principios del XX (1900), se tomó la decisión de no utilizar más estos términos en el psicoanálisis, pues los mismos generaban confusión con los términos simples del Consciente y el Inconsciente. El Supraconsciente trata de definir los factores que no controlamos de nuestra vida pero que traen orden a la misma, como la inspiración, las ideas, el funcionamiento de nuestro cuerpo, son los que le dan lógica y mastican la información previamente para que el Consciente las utilice. El Subconsciente es todo aquello que se oculta y que implica desorden, lo no resuelto, caos interior que negamos, por ello, la psicología decidió llamar a este concepto como “falta de consciencia”, nombrándolo “Inconsciente”. Por ello, la palabra Subconsciente desaparece de la psicología para quedar sólo en las visiones más espirituales. Pero aquí se niegan ciertos valores.


YO: ¿Cuáles?


SOY: Toma en cuenta que el Consciente es la fina película de agua que divide lo que está por debajo de lo que está por encima. Desde la visión del Psicoanálisis se diría que lo que asoma por encima es el Supraconsciente y lo que está debajo es el Inconsciente. Pero esto niega algo fundamental: el contexto del iceberg. Podríamos decir que el Ser es el Iceberg, y ese pequeño porcentaje que se asoma en la superficie es el aspecto Consciente del ser, mientras que el resto oculto bajo las aguas es lo que llamamos Inconsciente. Ahora bien, tomando el contexto, el aire que rodea al Consciente es el Supraconsciente, mientras que el agua que rodea al Inconsciente es el Subconsciente.


YO: Oh, ahora lo veo. Es verdad, siempre solemos confundirnos en la ubicación de los estados de consciencia, ahora lo tengo más claro.


SOY: Dicho esto, puedes comprender que el Ser, con su parte Consciente y su parte Inconsciente, son sostenidos por un Supraconsciente que trae orden y un Subconsciente que oculta el caos.


YO: El supraconsciente… ¿Eres tú?


SOY: Oh, no. Es verdad que el término Supraconsciente puede confundirse con la idea del Yo Superior, pero no es lo mismo. El Supraconsciente es una cualidad que incorpora lo que yo soy. Atraviesa lo emocional, biológico y mental. Gestionando el sistema nervioso central con sus mecanismos parasimpáticos y simpáticos. Mantiene la homeostasis en tu ser, mientras que el Subconsciente viene a desarmar dicha homeostasis mediante la presión del océano.


YO: ¿Por qué hace esto?


SOY: Es su naturaleza. Como el agua ejerce presión sobre los cuerpos que hay en su interior, el subconsciente realiza la misma fuerza, ocultando en los fondos abismales lo que no quieres ver en la superficie. Los animales muertos, los barcos hundidos, mucha basura. Pero también muchos tesoros perdidos. El subconsciente contiene al inconsciente, es decir, esa parte que no puedes ver de ti, que mueve tu vida a su merced, en función de fuerzas invisibles que te llevan a un lado u otro, sin reconocer la dirección en la que vas. El inconsciente es el desconocimiento de las cosas que posees en ti, no ver aquello que siempre estuvo delante de ti, y dentro de ti. El Subconsciente, pues, es un espacio mucho más amplio que va más allá de ti, que te rodea y que contiene datos, memorias de muchas más vidas que ésta que hoy posees. Si tu cuerpo es un iceberg, reconocerás que el consciente y el inconsciente viven en ti, en tus células, en la memoria de tu organismo. Pero el Supraconsciente y el Subconsciente abarcan mucho más, implican los contextos, las señales, la percepción del mundo, los datos que yacen en todas las cosas y que te contienen en un lugar y momento específicos. Como miles de otros icebergs, compartes en Subconsciente, y por ello, su fuerza interactúa conectando muchas personas, individuos, en distintos sitios y tiempos diferentes.


YO: Por lo tanto, la fuerza del subconsciente nos mueve a todos, y registra todo, guarda cada situación en sí, y le envía al fondo de su océano para resguardarlo. ¿Cómo me conecto con mi Subconsciente?


SOY: Eliminando los límites, abriendo la imaginación. Siendo infinito, trascendiendo el juicio moral y ético que envuelve tu mente cultural. En el subconsciente se guarda información que no entenderás si la ves con los ojos de tu mundo consciente. Debes permitirte soñar despierto, para soñar profundo al dormir. Debes caminar por la vida como si te encontrases dentro de un mar, donde todo es imaginación y está conectado por las olas. Imagina despierto, viviendo.


YO: Me hace sentido la idea de andar por la vida como si fuera un musical, en que cada situación tiene una música específica de acuerdo a lo que está pasando…


SOY: Y cualquier cosa que suceda, puede despertar miles de datos que no tienes presente. “Paloma”.


YO: ¿Qué?


SOY: Conejo…


YO: Casa…


SOY: Paloma…


YO: Volver.


SOY: ¿Por qué?


YO: Cuando era niño, mi abuelo me traía palomas de su hermano colombófilo, y cada día liberaba una paloma que volvía a su casa. Y el conejo, es en mí el dolor por perder la casa, porque un conejo se me murió el día que nos negaron la compra de nuestra propia casa…


SOY: Ruta, papel, cielo… Fuego.


YO: Me aterra el camino del Dragón. Tengo miedo que al comenzarlo vuelva a pasar lo mismo… Que alguien muera, que mis amigos me abandonen, que me aleje de mi madre, que se caiga un proyecto, que fracase en mi misión…


SOY: Tortuga, bebé, audífonos.


YO: …Mi animal favorito es la tortuga… Debo ir más lento, paso a paso, respetando los momentos de hibernación, y tal vez, esa lentitud me la exige la idea de querer ser padre… Debo aprender a escuchar mejor esos silencios…


SOY: Planeta… Lápiz… Vaso.


YO: Contar mi historia… Veo siempre el vaso medio vacío, mucho por hacer por este mundo, el único sitio que considero mi hogar.


SOY: Sueño…


YO: …Tengo mucho sueño…


SOY: Es de noche, y el sol se ha tapado con sus manos. La blanca niña de cabellos albinos me da la espalda…


YO: Hay una ballena que aúlla, como un toro se acerca a mí entre colores que huelen a miel. Me siento empalagado, como mi boca llena de colmena. El sonido de las abejas bajo el agua es aterrador, pero hace florecer enredaderas bonitas. Aunque… Me enredan, no puedo salir a respirar. Una nutria me trae aire… Y allí veo a la niña de espalda, mojada. Se va… ¿se va?


SOY: La alcanza la vida como flujo de río en el agua…


YO: El sol está sobre el agua, pero se tapa con sus manos. Veo brillar las cúpulas de la ciudad anfibia. Kolenos nadan por ahí… Es tan bonito ver las manos del sol. Siento que me duermo… ¿Estoy acaso muriendo?


SOY: Sí. Estás muriendo, como dijimos, a los 33 años. Esta es tu muerte, Matías. ¿Te despides?


YO: ¿Acaso vale la pena despedirme?


SOY: Tienes miedo de hacerlo…


YO: Las palomas no pueden nadar. ¿Cómo volver a casa? ¿Existe realmente mi casa? No tengo casa… A dónde voy?


SOY: Por eso no quieres irte de aquí…


YO: No tengo a dónde ir. Hoy es el día de la Independencia en mi país… Pero cada día lo siento menos mi país… Me duele… No quiero volver. Mi casa es África. Es el Mediterráneo. Tengo miedo a estar solo, mi madre también, tenemos el mismo miedo… Pero los dos queremos estar solos. Me da miedo volver, pero sólo porque no sé por qué ir. Los amo a todos… Pero tengo miedo de perderlos si lo digo.


SOY: ¿Por qué los perderías?


YO: Siempre los perdí… ¿No lo ves? Han muerto, los que amé se han ido. Y los que están… ¿Cuándo se irán?


SOY: Tienes miedo a perderlos… Pero el mayor miedo es perderte a ti en ellos.


YO: Ser o no Ser… Soy por mí, o soy por ellos. ¿Somos acaso nosotros realmente, o somos por lo que los otros quieren que seamos? Yo siento que no puedo ser libre de lo que quiero, por hacer feliz a los otros en cómo debo ser. Eso me da miedo… Volver a repetir, volver a ver esto… Ya se han ido muchos. No quiero perder más…


SOY: No te pertenecen… Las personas no pertenecen a nadie…


YO: Entonces que me suelten a mí también. Estoy en telarañas… Cansado de estirar, cansado de esperar que la araña venga y me devore. Ni ella me escucha. Es de noche…


SOY: Pero las nubes asoman al sol.


YO: Cállate. Cállate, cállate… Shhh, silencio… Escucha el silencio. La ballena aúlla como el lobo. La veo venir a lo lejos… Tengo miedo que me trague. Detrás se ve, hermosa, brillante la ciudad perdida. Taabathar, reluciente de los altos Azules, se pierden en el cobalto del mar. Quiero pintarlos, pero no tengo pinceles… Acuarelas tal vez…


SOY: Divagas… Sueñas.


YO: Cállate, y déjame morir en paz. Dame mi independencia. Madre Patria, ya eres libre, déjame a mí ser libre… Aunque… Yo no quiero ser libre… Tengo miedo de ser libre.


SOY: Por qué?


YO: Porque estaré solo… Abandonado, triste… Despojo de la humanidad… ¿Quién querrá a un errante? Tengo hambre… Hambre de llenarme, y sin los demás me siento vacío… Fractales, veo partes de mí sangrantes por los suelos… Suspiro, pero ni así les uno… Tengo miedo de abandonarme, y aún así lo hago… No quiero estar solo… Y quien espero que me abrace no me abraza. ¿Por qué es tan complicado?


SOY: Porque aquí está todo, y lo ves todo. Por ello el consciente es simple, focalizado, determinado, porque es menos, busca menos, siente menos, el consciente sabe qué busca…


YO: Yo no lo sé… ¿Qué busco…? No lo sé… Quiero dormir, eso, dormir y no despertar de este Sueño Eterno.


SOY: Tu sueño es tu despertar…


YO: ..             .  es    de noche…. .    

               . shhhhhhh… el todo me habla, pero no quiero escucharlo…

                       me incomoda … por      que  



                                                                   no. 


SOY: Todo es perfecto.


YO: Mírame. Como un feto en la mano del mar… Así me siento, flotando en la inmensidad de un océano oscuro. De noche… Se reflejan las estrellas. Como en sus ojos que me entregan los recuerdos… Oh, piedad de mi alma, aclamo! Un beso… Sólo eso… Uno. Y así me duermo. Estoy cansado… ¿Qué ha de pasar?


SOY: Te estás despidiendo, dejando atrás a quien llegó primero. Te duele tener que partir, te duele tener que quedarte. Te duele tener que ser adulto, te duele dejar de ser niño… Te duele que a tu madre le duela, te duele que las madres te rechacen, te duele no saber cuál es tu hogar, ni a dónde te diriges… Te duele tener que ser libre e independiente…


YO: Me duele… El corazón.


SOY: Y eso te agota.


YO: ¿Qué doy al mundo de este deplorable estado de neurosis?


SOY: A ti mismo, te entregas como eres. Eres suficiente. Pues eres un Océano…


YO: Floto en él. Qué tragedia es aquello tan simple. Lo que una charla soluciona, es una eternidad para el silencio de un alma dolida. ¿Porqué lanzarse a la agonía?


SOY: Pues los tesoros están en el fondo del mar. Y alcanzarlos duele. Estás llegando al fondo… Y por ello agonizas.


YO: Estoy cansado… Me rodean imágenes e ideas incoherentes…


SOY: Memorias del subconsciente. Allí están las claves que sostienen tu ser. No tienes más opción que sumergirte…


YO: Tengo sueño… Estoy cansado…


SOY: Estás muriendo… Y es momento de permitirte morir al fin. Es tiempo de soltar, y reclamar tu independencia. Muere una y otra vez.


YO: … Muero…


SOY: Conviértete en el Soñador Eterno.

TAREA

EN BREVE

CÓDIGO

ERA GEMINIS= Entre los años 4430 y 6580 a.C. aproximadamente, se dio la era de las grandes migraciones. Los humanos de todas partes del mundo empezaron a moverse por las planicies, a migrar, buscando nuevos sitios donde asentarse. Las diferentes culturas no posían un territorio fijo, y los caminos eran de todos. La comunicación entre los grupos era más individualista y familiar. Se empezaron a cosntruir los primeros círculos de piedra de los cuales hoy podemos ver algunos, en resonancia con los de otras eras pasadas.
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