YO: Me encontraba sentado frente a una plataforma de hielo, solo, preguntándome quién era yo, y de repente, de la nada, una voz comenzó a contarme una historia, la historia del Agua.

“Imagina que el universo es un vasto océano. Por dentro, es profundo y oscuro, dando la impresión de vacío, pero sabiendo que en realidad, está lleno. Su poder es infinito, pero como lo era todo, nunca pudo ver ni experimentar de lo que era capaz. Entonces, el océano decidió expresarse. Sus movimientos crearon ondas y corrientes, que llamamos Tiempo. Y también crearon dos grandes fuerzas: una cálida en la superficie y una fría en sus profundidades, a las que llamamos Positiva y Negativa. Juntas, crearon una corriente mayor, un vórtice en espiral que atravesó todo el océano, experimentando todo dentro de sí al máximo, pero externamente. Esta fuerza generó calor y el océano se evaporó. Por primera vez, el Todo llegó a conocerse a sí mismo en una nueva forma: como gas. El vapor comenzó a subir y el océano desapareció. Sabía que volvería algún día, pero con nuevos nutrientes y minerales, que llamamos Sabiduría. Y luego el cosmos helado condensó el vapor y lo convirtió en cristales de agua, creando nieve; cada copo único y especial, con su propio camino a seguir. Pero al caer sobre la Tierra, su belleza y divinidad se transformaron, creando hielo: la tercera forma expresada por el océano. Ahora, cada copo de nieve se derretiría y se volvería líquido, moviéndose a través de los cuatro ciclos del Ser: Primavera, Verano, Otoño e Invierno, que el océano llamó Expresión, Experiencia, Integración y Trascendencia. Una y otra vez, los copos de nieve se evaporaron y cayeron del cielo. Desde el vapor hasta la niebla, las nubes y la lluvia, cada gota de agua única sigue su camino de regreso al océano, llenándose con nueva sabiduría. Dieron forma a arroyos y ríos, lagos y lagunas, humedales, bahías, mares y océanos. Pero a pesar de este proceso de separarnos, de creernos únicos y diferentes, siempre hemos sido Uno; siempre hemos sido el Océano que se experimenta a sí mismo en sus muchos estados y formas. Soy Uno, un solo Ser que vive en todas las cosas. Mi cuerpo creó vida, el agua absorbió la luz y me transformó en plasma, amebas y algas, plantas, insectos, gusanos y peces; árboles y reptiles, aves y mamíferos. Me convertí en Humano y en muchos seres en muchos mundos. Me convertí en Consciencia, hasta que cada parte de mí pudo valerse por sí misma y creer, y volver a mí. Siempre fuimos Uno; Un Ser que se expresa en muchas formas. Todos formamos parte del mismo ser biológico que nos conecta, y la evolución es la forma amorosa a través de la cual se expresa. Pero entonces el Océano de Hielo me interrumpió y habló: “El agua es sólo un aspecto más del verdadero océano, porque el agua tiene un principio y un final. El agua es la mejor forma a través de la cual podemos comprender el Todo. Pero pregúntate: ¿qué océano es más grande que cualquier forma de existencia?” …Y entonces lo entendí: la clave estaba en la primera palabra que pronunció el Océano de Hielo: “Imagina”. El océano más grande: atemporal, infinito, sin espacio ni reglas, leyes ni límites; donde Nada y Todo coexisten, está dentro de nosotros: es nuestra Mente. El Universo es Mente. Todo lo que existe es fruto de nuestra imaginación, que todos creamos juntos. Todo lo que existe es una idea que se convirtió en pensamiento que, como gotas, se derramó en lluvia de creaciones imaginadas y se convirtió en nuestra experiencia, creencias; y estas creencias se hicieron realidad. Cada ser es una neurona en esta vasta Mente Universal. Todos formamos parte de una misma Consciencia, experimentando y creando pensamientos. Y estos pensamientos nos han encerrado en un mundo de creencias. El pensamiento sólo puede existir dentro de una red; cada parte, llena de potencial, está conectada con las demás, creando sinapsis que tienen el poder de impulsarnos a la acción y transformar nuestra realidad. Todos y cada uno de nosotros somos miembros de esta gran red, como nodos conectados por cables invisibles que no podemos ver. Y ahí fue cuando lo entendí: unir, cordar… re-cordar. (members, re-member). Recordar quién soy es reconectar las partes de mí mismo que se han separado a lo largo de la historia, perdidas en las olas del tiempo. Hoy, formo parte de la Mente de un Ser enorme llamado Planeta Tierra. Cada cultura, religión, nación, ciencia y arte es una forma de pensamiento de la Tierra. Pero sus pensamientos son incongruentes, no porque no sean ciertos, sino porque cada uno de nosotros cree que posee la única verdad. Todos los conflictos mundanos que nos hacen sentir esta incongruencia, surgen de la desconexión de muchas partes de nosotros mismos, de haber olvidado que todos somos Uno, que yo soy Uno. Recordar es reconectar todas partes, los miembros, que un día conectarán los pensamientos del mundo entero. Pero por razones desconocidas, una de estas muchas partes creó un pensamiento que nos desconectó. Aquí es donde comienza mi camino, ante la inmensidad del Continente Blanco rodeado de los grandes Océanos, con el cuerpo de la Tierra como mi recipiente y el objetivo de reconectar cada parte de mí mismo. Y de esta manera, recordar que Yo Soy.

SOY: Avanzo hacia el horizonte, fluctuando en las olas de la existencia. Soy una gota en medio de océano de la mente universal… Nada más existe, que el mar que me rodea, nada más existe que la noción de que soy yo, una simple gota, y que yo soy un gigantesco mar.

YO: El Agua es lo más cercano que conocemos a la existencia de Dios, del Cosmos… Somos Agua…

SOY: H2O… Dos simples átomos de Hidrógeno que se unieron a un potente átomo de Oxígeno. Una sagrada Trinidad Espiritual que se manifestaría en tres estados: Vibración, Energía y Materia… Sabiduría, Amor y Voluntad… Espíritu, Alma y Cuerpo… Mente, Emoción y Físico… Gaseoso, Líquido y Sólido… El Agua es el camino de la existencia, es el vehículo de la consciencia. El Agua es la manifestación del Océano de la Mente Cósmica, y es por ello que es sagrada. El Agua no da Vida, el Agua Es Vida. Los humanos creen que el agua es un requisito para permitir que exista vida en un planeta, y que sin agua no podríamos vivir. Esto es un error conceptual. La vida no existe sin agua porque el agua es vida. El Agua es un solo cuerpo vivo expandido a lo largo del universo, en diversos mundos, cometas, anillos planetarios, y sus gotas se convierten en miles de formas como las células en nuestros cuerpos.

YO: Así como existe una célula neuronal, una cutánea, una cardíaca, otra ocular y otra intestinal, todas existen porque son agua administrada y organizada de maneras diversas.

SOY: Por ello no sois seres inteligentes, el agua es inteligente. Recuerda, tiene memoria, y se expande mediante la geometría. Igual que un copo de nieve se manifiesta en perfección con sus 6 puntas, los seres vivos también se organizan con brazos y manos, cabezas, genitales y un centro en su torso, o ramas y raíces con su tronco. El agua se ordena geométricamente, y es un mineral que conecta al reino de las rocas con el reino de los seres vivos.

YO: ¿O sea que nosotros poseemos la memoria de todo lo que pasó en el universo mediante el agua?

SOY: Así es… Si accedes a la memoria del agua puedes acceder al recuerdo de todos los registros que tu agua vivió, comenzando por tu familia, ancestros, continente, las especies, la historia de la Tierra, y luego los cometas, otros mundos, extraterrestres y los océanos helados del cosmos hasta sentir las otras dimensiones.

YO: Por esto muchas culturas utilizan el agua como vehículo de conexión divina… Bautismos, Lavados Sagrados de manos, pies y rostro… Los sitios de agua son más que fuentes de vida, son fuentes de sabiduría para muchas culturas.

SOY: El agua es un espejo de la Divinidad. Puedes ver el universo y sentirle en el agua. Los mares, los océanos, lagos y ríos, cada uno con su propia forma, entregan datos diferentes.

YO: El Subconsciente es sus profundidades, el Inconsciente son sus corrientes, y el Consciente es el ser vivo que aprendió a nadar en el Océano.

SOY: Somos Agua.

YO: O sea que los que recordamos otras vidas, memorias del universo, lo hacemos gracias al agua… ¿Cómo?

SOY: Así es… Lo hacéis por la vibración de la misma.

YO: Como lo de Masaru Emoto. En que en sus estudios mostraba cómo el agua cambia de patrones moleculares en función de la vibración que reciba… Ordenándose armónicamente con palabras de amor, y formando estructuras caóticas ante palabras de odio.

SOY: La vibración que consumes, con la que resuenas, que llega a ti, que emerge de ti… La que condiciona el ambiente en que te mueves, la música, las noticias y personas que escuchas; todo ello moldea las moléculas de tu agua, condicionando al plasma de las células, y así al ADN y su información registrada. Dependiendo de la vibración de tu ser y lo que dejes ingresar en ti, las formas de tus aguas cambiarán, condicionándote o liberándote.

YO: Todo depende de la intención, de la resonancia y frecuencia en la que me encuentre, que reciba y emita, eso abre puertas a distintas memorias…

SOY: Así es. Antes de ser mamíferos terráqueos, todos los humanos al igual que todos los seres vivos, surgieron a partir de bacterias unicelulares en el fondo de los océanos cerca de las calderas volcánicas submarinas. La energía térmica generó una reacción química que hizo que ciertos componentes orgánicos se ordenaran para ahorrar energía. Pronto, esos compuestos crearon una pequeña membrana a su alrededor encerrando agua que sostuviera y protegiera a dichos compuestos. Así surgió esta célula, una gota de agua delimitada, separada del resto por esta membrana azucarada. Este es el ancestro común de todo ser vivo multicelular como los humanos y los árboles. Todos son océano, de formas distintas, y por lo tanto, la información que comparten es la misma.

YO: Y lo mismo a nivel cósmico…

SOY: Porque el agua viaja por cometas congelados de hielo, que como espermatozoides, siembran mundos con vida. Los componentes minerales de la Tierra y el agua de los cometas en el periodo de formación, a una temperatura perfecta, generaron la reacción necesaria para liberar oxígeno y nitrógeno capaces de crear una membrana planetaria en esta célula terrestre, que llamáis Atmósfera. Igual que un óvulo, al crear esta membrana, se defendía de otros posibles programas, destruyéndolos en la superficie externa, algo que sueles ver como hermosas estrellas fugaces.

YO: Antes de las primeras lluvias, el agua también llegó de los cielos.

SOY: Y creó, en su condensación, los océanos.

YO: Hoy tenemos 5 principales, pero antes era sólo uno…

SOY: Pantalasa, allí nació la vida; en tanto hasta millones de años después, en la Pangea en camino de formación, no había más que volcanes y desiertos. Con la deriva continental, Pantalasa fue creando también el océano de Tetis, que desaparecería dando lugar al océano Índico, mientras que la gran Pantalasa se convertiría en el actual Gran Océano Pacífico. Al fracturarse las Américas separándose de África, dejaría que las agua invadieran las cuencas creando el Océano Atlántico. Al norte, el continente de Laurasia se movió del polo creando Asia y Europa hacia el sur, dejando el Océano Ártico en la cima del mundo, mientras que por el contrario, la Antártida se colocó en el polo sur, rodeándose de corrientes circulares a su alrededor que llamamos el Océano Antártico.

YO: Los 5 Océanos que contienen a las Tierras continentales.

SOY: Los mismos son la sangre del mundo, la circulación de la memoria, los registros vivos y en constante transformación.

YO: Siento en sus aguas las células que representan los anclajes de su memoria. En el Ártico: tierra de Jorge, Svalbard, islas Liajov y del Norte, así como las grandes islas de Nunavut y Groenlandia. En el Atlántico, a lo largo de la dorsal central: Islandia, Faroe, Azores, Ascención, Santa Helena, Tristán da Cunha. En el Antártico: Islas Sandwich y Georgias del Sur, Kerguelen, Heard y McDonalds. En el Índico: Maldivas, Isla Amsterdam, Territorios Británicos Índicos, Mauricio y Reunión. Y en el Gran Pacífico: Micronesia, Marianas, Kiribati, Polinesia Francesa, Rapa Nui, Islas Cook, Islas Marshall, Niue,  Samoa,  Tokelau, Tuvalu,  Nauru y Hawaii.

SOY: Las islas oceánicas no continentales son las que registran la memoria del cosmos en la Tierra, las que unifican la información ancestral del fuego en los volcanes, de la tierra en los minerales, del agua en los océanos y del aire en los vientos.

YO: Allí es donde nos unimos a nuestros orígenes… En el agua… Allí recordamos cada uno de nuestros pasos…

SOY: Allí habéis dado los primeros pasos de vuestra existencia, allí recordaréis vuestra historia, y desde allí habéis trazado la Red de Consciencia Planetaria. Vuelve a los Océanos, pon tus pies en sus aguas, y siente la Vida que fluye en todo el Universo… Recuerda, Recuerda, Recuerda…

YO: En el Océano de la Mente Universal comenzó el Gran Viaje de la Existencia… En el Océano de la Gran Madre Tierra comenzó nuestro Viaje por la Vida… Y es en el Gran Océano de nuestra Imaginación donde comienza nuestro gran Viaje hacia el Futuro…

SOY: Yo Soy el Océano Cósmico…

YO: Yo Soy Océano y Mar…

SOY: Yo Soy Agua…

YO: Yo Soy Vida.