YO: En la energía que produzco a partir de mi sacro, obtengo la base de todos mis potenciales para actuar. ¿Es esa energía, pues, la que me lleva a la acción?

SOY: La acción es la capacidad de realizar un acto. Acto viene de los conceptos griegos “ágo”, que significa “guío”, y de “agón”, que significa “reunir”. Básicamente, el sentido es reunir todo lo que tengo y dirigirlo, conducirlo hacia un destino. Por ello, el vocablo latino “actum” se refiere a poner algo en movimiento. La energía que se recibe y ancla en el corazón, se procesa y asimila en el plexo, para luego entregar esa energía al sacro, quien producirá lo buscado, y todo eso generado se lleva hacia un nuevo destino, afuera, a través del dar, soltar, entregar, ponerse al servicio. Y lo hace mediante la acción, algo que está relacionado al chakra Raíz.

YO: Sería como la plasmación o manifestación de lo generado en mi interior con la energía recibida y asimilada por mi ser.

SOY: Exacto.

YO: ¿Cómo se podría ver esto en nuestras vidas?, mediante un ejemplo…

SOY: Pues, podemos verlo con lo que estás haciendo día a día. Cada mañana que te levantas, pones la intención de entregar parte de tu energía a un servicio planetario yendo a la pirámide. Entras, subes, haces tu meditación y luego expandes el concepto del día a toda la Red. Recibes de esta manera la energía de la pirámide que amplifica tu campo energético conectándote conmigo, tu Yo Superior. Así, al volver, te sientas y escribes nuestras conversaciones; esto es el proceso de cómo decodificas la energía recibida, la traduces en tu lenguaje, la asimilas y la vuelves parte de ti. Entonces, generas algo nuevo, que es esta conversación. Lo publicas para ti, aunque otros lo leerán. Y a lo largo del día reconoces lo que has creado, lo relees… Es tu producto, el cual creaste a partir de energías recibidas por la mañana. Entonces, tomas esta información y la llevas a la acción: las alineaciones diarias en que entregas a miles de personas en vivo lo que has asimilado. Sus respuestas, amor y agradecimiento son la energía que recibes esa noche, para que al otro día, puedas nuevamente tomar fuerzas para realizar la acción de ir a la pirámide. Es un ciclo.

YO: Entiendo, aunque a veces siento que lo hago con más ganas que otras… ¿Eso por qué es?

SOY: Porque la acción es una energía ondulante que vibra como las olas del mar, no es una constante. Para tener inercia necesita el momento de reposo. Sueño y Despertar. Es necesaria la baja de tensión y la alza de tensión, pues la luz se mueve en una onda de frecuencias positivas y negativas, cortas y largas. Esto es lo que da movimiento, impulso. Nada se mueve en una constante línea ascendente acrecentando su subida o aceleración. Cuanto más subas, más lento irás porque necesitarás mucha más fuerza. Es por esto que se necesita bajar, volver en pendiente.

YO: Se parece a una gráfica de ondas en que hay una elevación en altura y una depresión en bajada para repetirse el circuito una y otra vez, así como en el plano emocional llamamos a la elevación euforia y alegría, y a la bajada depresión y tristeza. ¿Estos deben repetirse también?

SOY: Sí. Así como para el corazón el circuito energético es dar y recibir horizontalmente con el entorno, en el centro base el circuito energético es ascendente y descendente, relacionado a la euforia y la depresión. A mayor euforia, mayor depresión; a más alegría, más tristeza. Y esto es un ciclo inevitable pues, como dije, la energía de la luz se mueve en ondas y espirales. Para que un objeto o energía pueda avanzar se necesita la fuerza de inicio y la caída de la bajada, pues es esta última la que da el impulso y velocidad para tomar la curva de la alzada y llegar a la cima. Es por esto que cada gran éxito en sus vidas está directamente relacionado a una crisis o fracaso precedente. Las crisis son las claves del éxito, las caídas son lo único que te hace reconocer el hecho de ponerse de pie.

YO: O sea que el sentirse mal, cansado, débil, triste, depresivo, no es algo que deba evitarse en la vida, sino saber utilizar…

SOY: Tenéis en vuestra cultura una sobrevaloración respecto a lo que es ser alegre y vivir feliz. La búsqueda incesante de la felicidad os hace huir de la pena, del dolor y la angustia, negándolas, tomándolas como el mal del cual hay que escapar. Pues, lamento decirles que jamás podrán escapar de este circuito en tanto seáis seres vivos. Pero sí os diré que hay muchas maneras de vivir esas curvas.

YO: ¿Cuáles?

SOY: Vamos a lo lógico y simple. Toma una extensa onda de vibración. Como la que ves en la siguiente imagen. La línea roja es el espectro de luz. La línea de frecuencias (Hz) muestra los colores que se perciben en función de la velocidad en que vibra esa onda, es decir, con qué frecuencia se repiten sus ascensos y descensos. Cuanto más grande es el objeto, más pausada será la frecuencia que emite, más baja frecuencia, y cuanto más pequeño el objeto, más corta la frecuencia, alta, es decir, que vibra mucho más rápido y los ascensos y descensos son cada vez más veloces.

A mayor vibración, mayor frecuencia, más rápido, y más imperceptible. Si te fijas en la palabra en rojo “Visible” sobre el gráfico, verás que debajo en línea recta se pueden ver los colores del arcoíris en un tramo corto de la longitud de onda. Eso se refiere a lo que los humanos pueden ver y percibir. Todo los demás es imposible de ver. Pero algo más, cuanto más rápido vibre, como el Núcleo Atómico al final del gráfico, puede pasar que se rompa la estructura atómica, disolviéndola y así generar Fusión Nuclear. Esto genera la famosa energía nuclear, que es tan buena para crear energía, y tan mala para los organismos vivos, pues rompe su armonía. Ahora bien, como verás, la vida es una constante de ondas de energía con subidas y bajadas a distintas frecuencias. También puedes compararlo con un lector de latidos del corazón, en el que ves el pulso en una gráfica. Las subidas y bajadas de la gráfica indicarán el pulso del corazón que expande y contrae, pero si sólo contrae o sólo expande, se llama infarto. Y una gráfica en la que sólo se ve una línea recta se llama Muerte.

YO: Quedó claro… ¿Y cómo se vería esto en nuestras vidas?

SOY:  Pues imagina ahora que cada subida convexa en la línea roja es la felicidad y las curvas cóncavas son la depresión. Cuanto más frecuencia haya entre los espacios, como al inicio de la línea de la imagen, el proceso será lento e invisible, no podré relacionar de dónde viene mi depresión, o por qué me siento como me siento, pues hay un largo tramo de tiempo para subir y bajar. Hacia el medio de la gráfica, podemos ver que hay una cierta armonía, en cada actitud, acción, puedo identificar los momentos de bajada. Sé qué cosas me afectan en el día a día, qué me hace feliz, y qué me pone triste. Pero hacia el final de la línea, podemos interpretar que tu búsqueda de la felicidad es exacerbada, tratando siempre de estar arriba, mediante la euforia más que la alegría, acortando los plazos, las frecuencias, entre las subidas y bajadas, profundizándolas cada vez más, llevándote a un estado de euforia y depresión tan rápidos que parecen ser ambas dos líneas paralelas y constantes. Y esto es tóxico, es fusión nuclear, destruye la vida. En la negación de una de las dos fuerzas, terminas empoderándola para que destruya tu realidad, dándole su propia identidad. Así es como caes en la depresión o euforia, y necesitas drogas para alimentarlas, porque ya no logras generar energía propia para sustentarlas.

YO: Entonces, debo reconocer que ambas son las que me ayudan a avanzar, no una sola, sino las dos, ambas me impulsan como el latido del corazón. ¿Cómo les reconozco?

SOY: Las curvas convexas, las cimas de la onda, se llaman “Fortalezas”, y las cóncavas, las depresiones de la onda, se llaman “Debilidades”. De igual manera que la utilidad en el dar del corazón es aquello que puedo entregar a los demás de mí, y la inutilidad en mi corazón es lo que me permito recibir de los otros para permitir el funcionamiento correcto del circuito, el hecho de comprender las fortalezas y debilidades en mis acciones permite identificar el circuito energético de la Raíz. Ambas conforman tus Atributos.

YO: ¿Cuál es la diferencia entre Atributo y Cualidad?

SOY: Una Cualidad es una propiedad que se considera propia, natural y original de un individuo. Un Atributo es algo adquirido por la experiencia y asimilación de la energía en tu proceso de evolución y crecimiento personal. Así como hay cualidades negativas y positivas, también hay atributos positivos y negativos, habilidades que pueden considerarse adquiridas en la experiencia que hacen daño a uno mismo o a otros, pero que al saber accionarlas correctamente tienen el efecto esperado.

YO: ¿Como qué, por ejemplo?

SOY: Ser un dictador es un atributo, aunque no sea el mejor. Ser asesino es un atributo, pues logra cumplir su cometido de buena forma como el dictador, aunque son distorsiones.

YO: Y entonces, ¿qué son las fortalezas?

SOY: Es aquello que reconoces en ti, que te hace justamente sentirte fuerte y presente en ti mismo a la hora de actuar. El pulso que posees para accionar.  Los atributos que has conseguido a lo largo de tu vida son los que te hacen actuar con total presencia e integridad.

YO: En mi lista anoté que una de mis fortalezas por ejemplo es no tener miedos, y permitirme llorar delante de los demás sin ocultar lo que siento.

SOY: Por más que la sociedad interprete “llorar” como una debilidad, a veces es más fuerte quien permite expresar lo que siente que el que oculta lo que le pasa por miedo a romperse. Allí, el aparentar ser fuerte cuando se está mal no es una fortaleza, sino una debilidad.

YO: ¿Entonces cuáles son las debilidades?

SOY: Son aquellos atributos que te definen a la hora de actuar pero que debilitan tu estabilidad personal.

YO: Por ejemplo, yo anoté: ser autocrítico, tener pereza, ser ingenuo, hacer lo que otros quieren para que no se enfaden… Entre otras.

SOY: Si en lugar de luchar contra ellas pensando en que haber caído es como haber fracasado en la vida, utilizas estos momentos como proceso de introspección, de autoanálisis, sabiendo conscientemente que es un tiempo que debes tomarte para ti de inacción previa a la acción, entonces te ahorrarás la energía que usas en la batalla contra la caída, y la aprovecharás como el envión que te impulsará a la cima.

YO: El objetivo de la vida no es encontrar la Felicidad, pues…

SOY: Claro que no, el objetivo de la vida es vivir en Armonía. Libérate del romanticismo mágico y poético cultural que mantiene a las personas sufriendo todo el año para ganarse dos semanas de euforia vacacional, o ese anhelo por esforzarse para llegar a tener los minutos de gloria en el éxito, la euforia de haberlo conseguido. Eso no es la vida. La vida es armonía, es día a día, paso a paso, subidas y bajadas. Encuentra la frecuencia correcta en tu longitud de onda, y hallarás estabilidad, donde tus atributos de fortaleza y debilidad, ambos, serán tus pasos hacia delante accionando en el camino de la vida.

YO: Reconozco mis debilidades…

SOY: …Y así darás el salto a tus fortalezas.